martes, 26 de marzo de 2013

ETAPA 2: MIDELT – ERFOUD


El día de hoy ha sido muy bueno. Hemos salido puntualmente con el sol de la mañana levantando por detrás de las montañas. Teníamos por delante 323Km combinados de carretera y pista.
 

 

Después de unos kilómetros de carretera sin más complicación que esquivar a los coches marroquíes, y echar de beber a nuestro 405, para lo cual nos hemos tenido que salirnos del track unos 3 o 4 Km (y volver) ha empezado la zona de pista. Hoy hemos salido un poco más preparados para esta zona, hemos bajado la presión de las ruedas y ahora no se notaban tanto las piedras del camino.
 

 

Lo dicho, hemos entrado en la zona de pista, muy rápida y muy ancha, donde podíamos dar cancha a la potencia del motor y a nuestras ansias por disfrutar conduciendo fuera del asfalto. No es que fuese un terrero fácil, pero era mucho menos pedregoso que ayer y no teníamos que lamentar dolores. Había muchos agujeros y piedras pequeñas en el primer tramo, pero el mayor problema estaba en que, al haber mucho polvo blanquecino y ser muchos coches, la estela de polvo en suspensión era kilométrica, y cuando alcanzabas a alguien más lento que tú, había que darle distancia para encontrar una zona ancha para poder ver y adelantarle.  De este tramo ha disfrutado Dani.  
 

 

El segundo tramo era quizá más lento y con muchos más baches y piedras más grandes, (Jorge al volante) pero nada que no se pueda pasar con unas buenas indicaciones del copiloto y 6 ojos puestos en la carretera. En este tramo hemos visto como otros coches quedaban empotrados contra las paredes de piedra del camino, sin más consecuencias que el paragolpes partido y la rueda delantera. A nosotros en este tramo, se nos ha acabado por partir los 2 soportes de la baca que aún quedaban vivos y hemos visto volar los tacos de madera que pusimos ayer como solución. Así que no ha quedado otra, solución provisional para anclar la baca, (que ha durado hasta el final de etapa, así que no hacemos las cosas tan mal) y meter las planchas (también) al maletero. Cuando Germán ha cogido el coche después del problema de la baca, el culo del 405 iba bastante más bajo y de nuevo las ruedas rozaban con las faldillas al encontrar baches, como antes de salir de Madrid. Ningún problema, sólo un pequeño ruido chillón y un pequeño cambio en la dinámica del coche.

 

 

Germán llevaba ahora el coche en un tramo parecido al primero, rápido, con pocas piedras y algo de tierra arcillosa que hacía que, al dar gas al salir de una curva o esquivar algún agujero, el 405 se cruzase y tuviese que contravolantear y corregir la trazada, ha disfrutado como un niño con botas de agua. También hay que decir que Germán mantiene el trofeo de golpear los bajos del coche con las piedras, ayer ya aboyó un poco la protección del depósito, y hoy, casi con total seguridad, habrá que sacar gravilla de encima del cubrecarter. Al menos para eso las pusimos, ¿o no?

 

 

Después Dani, de nuevo al volante, ha hecho el último tramo de pista, pedregoso, donde ha tenido que bajar la montaña que habían subido antes Jorge y Germán. Mucha precaución, tranquilidad y buen paso, aunque también ha tenido momentos de diversión. Al final de este tramo había mucho poblado donde había que pasar despacio. Los niños siempre se acercan al coche a saludar y ver que haces por su casa. Es curioso ver su modo de vida y como, con poco que se les puede dar, te miran felices.  
 

 
Por ultimo quedaban unos 150 Km aproximadamente, de carretera hasta el final de etapa, en el camping. Jorge a los mandos en modo tranquilo. Tramo muy aburrido, sobre todo después de cómo lo hemos pasado por la pista. Algún que otro susto ha habido, cuando al intentar adelantar a una furgoneta cargada hasta arriba, ésta nos ha cerrado y Jorge ha tenido que salirse por el arcén, perfectamente hecho de tierra muy suelta y a un desnivel de 5 cm de la zona asfaltada, ha tenido que controlar como la trasera del coche se iba de lado a lado. Precaución al volante amigo conductor, como decía la canción. La verdad es que en ningún momento ha habido una situación de peligro para nadie, solo pequeñas cosas que no te esperas, pero todos queremos volver de una pieza, y el 405 también, así que velocidad solo cuando el terreno lo permite, y como se ha dicho antes, con 6 ojos en la pista.

 

 

Hemos acabado la etapa a las 16.30 (7horas) bien de tiempo y por fin, con luz al llegar al puesto de control, cosa que se agradece. Hemos podido conversar con compañeros, oír sus historias al volante, sus averías, y todo lo que el raid va deparando a los participantes.
Estamos los 3 muy contentos con la experiencia y con la gente que participa, los problemas y las horas al volante unen. La gente es muy maja, somos una pequeña gran familia.
Mañana ultimo día antes del día de descanso. Hoy toca revisión del vehículo, y unas cervezas con los compañeros para afrontar el día de mañana. ¿También hemos venido a eso no?

No hay comentarios:

Publicar un comentario